¿Qué es la Polio?

La poliomielitis es una enfermedad altamente contagiosa, producida por un poliovirus que compromete al sistema nervioso central y puede producir parálisis. Afecta fundamentalmente a niños y niñas menores de 5 años provocando la muerte por parálisis de los músculos respiratorios en hasta un 10% de los enfermos.

El 24 de octubre se conmemora el Día Mundial de la Poliomielitis. Es necesario destacar que no existe tratamiento específico, pero que se trata de una enfermedad erradicable, dado que el único reservorio es el ser humano, y que se dispone de vacunas eficaces que inducen inmunidad duradera.

En nuestro país, entre los años 1953 y 1961, la poliomielitis afectó a más de 10.000 personas. A finales de la década del ‘50 se inició la vacunación, y en 1984 se produjo el último caso a raiz de un virus salvaje en el país.

Desde 1988, la iniciativa de Erradicación Mundial de la Poliomielitis a través de la vacunación, ha logrado reducir la enfermedad drásticamente en todo el mundo. A finales de 2018, solo se identificaron 33 casos, pertenecientes a Afganistán y Pakistán. Con respecto a los tipos de poliovirus salvaje, el tipo 3 no se detecta desde el 2012. Desde el 2014 ha disminuido la incidencia del tipo 1 más del 90%, y en 2015 se declaró la erradicación del tipo 2.

Acerca de la vacuna: 

La vacuna anti poliomielítica parenteral (IPV o Salk) tiene potencia inmunogénica aumentada, induce la aparición de anticuerpos séricos IgM e IgG que neutralizan los virus durante la fase de viremia, evitando su pasaje al sistema nervioso central. 

La vacuna anti poliomielítica parenteral, que es la que se aplica en nuestro país, está compuesta por tres tipos de poliovirus, los cuales han sido inactivados con formol. Por tratarse de virus inactivados no hay replicación, así como tampoco colonización del tejido linfoide de fauces ni eliminación en las heces, siendo una vacuna segura para pacientes y convivientes de pacientes con compromiso del estado inmunológico. 

La estrategia para la fase final de erradicación 2019-2023 manifiesta la urgencia de erradicar la poliomielitis declarada una emergencia de salud pública mundial en 2014. Hay que destacar que los desafíos a los que nos enfrentamos no son de tipo científico o virológico, sino que están relacionados a que las vacunas lleguen a todos los niños y niñas. 

En nuestro país, debemos seguir instando a que todos los niños y niñas tengan su esquema de vacunación completo, ya que la disminución de las coberturas de esta y otras vacunas, pone en riesgo de reintroducción de enfermedades inmunoprevenibles a nuestra población.  

Datos y cifras
  • La poliomielitis afecta sobre todo a los menores de 5 años
  • Una de cada 200 infecciones produce una parálisis irreversible (generalmente de las piernas), y un 5% a 10% de estos casos fallecen por parálisis de los músculos respiratorios
  • Mientras haya un solo niño infectado, los niños de todos los países corren el riesgo de contraer la enfermedad. Si no se erradica la poliomielitis en estos últimos reductos restantes, se podrían producir hasta 200 000 nuevos casos anuales en diez años en todo el mundo
  • En la mayoría de los países los esfuerzos mundiales han ampliado la capacidad para hacer frente a otras enfermedades infecciosas gracias a la creación de sistemas eficaces de vigilancia e inmunización 
 ¿Cuándo se debe sospechar que un niño o niña  presenta poliomielitis paralítica?

Se debe sospechar la poliomielitis en los niños y niñas no vacunados, o parcialmente vacunados que presentan una sintomatología similar a la de una gripe (fiebre, dolores musculares, dolor de cabeza, falta de apetito), con lapsos de mejoría, pero que al cabo de 2 a 5 días después expresan dolor de cabeza, fiebre, dolores musculares intensos, movimientos musculares involuntarios y sensación de hormigueo en las piernas o brazos.  Uno a dos días después, aparece la disminución de la fuerza en las piernas o brazos, y la dificultad para caminar, progresando rápidamente hasta la parálisis, la que usualmente es desigual entre los miembros afectados.

¿Cómo evitar la polio?

La mejor forma de evitar la infección es mediante la vacunación. Esta vacunación está dirigida a los niños y niñas menores de 5 años de edad. Lo mejor es completar oportunamente el esquema de vacunación recomendado por las autoridades de salud de su país. Para que un niño o niña adquiera la inmunidad contra el poliovirus se requiere que reciba varias dosis de la vacuna.

¿Cómo se trata la poliomielitis?

No existe un antiviral o medicamento que detenga la progresión de la parálisis.

Esquema de Vacunación

Según el Hospital Garrahan, a partir de junio de 2020, Argentina incrementó la calidad del Calendario Nacional de Vacunación al adoptar la vacuna inactivada Salk (IPV). 

Este esquema es de cuatro dosis

-Primera a los 2 meses

-Segunda a los 4 meses

– Tercera a los 6 meses

 -Ùnico refuerzo al ingreso escolar (5 años)

Fuentes:

Organización Mundial de la Salud

Sociedad Argentina de Pediatría

Hospital Garrahan